Exactamente eso, que cada uno sepa cuál es su sitio y cada uno en sus propias ligas. Esto es, que mañana sepa a lo que viene, o mejor, a lo que debe esperarle, y que así se cumpla, es decir, a que los tres puntos (con el resultado que sea) se queden en casa, en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán.
Porque pasó por aquí el Racing y por poco nos quedamos con caras de aquello que ustedes me entienden. Y no debe volver a suceder. Entre otras cosas porque quienes pelean por lo mismo que nosotros no pierden, ni empatan, resuelven sus partidos de tres en tres y uno de los que va a venir a hacernos compañía, con lesiones o sin ellas, el Villareal, comenzó a sumar ayer. ¿Que está lejos? Sí, tambien lo estuvo hace alguna Liga atrás y acabó tercero o cuarto, igualito que el primer SFC que dirigió Jiménez.
Por eso hay que mantener, al menos mantener, las diferencias. Ya decía jornadas atrás que no había que obsesionarse con terceros ni cuartos puestos tan pronto. La liga ya se está comenzando a resolver por arriba, como estaba previsto, por los lugares esos que pertenecen (?) a Limitaciones o Barça y ya se han hartado de ilusionar al Levante, que una vez que pinche en Osasuna cederá semejante sitio al que le toque que, ahora mismo, ni lo sé ni me importa.
Y es que además, se apuntan en la presión Español, At. Bilbao, Málaga y Osasuna (este último no creo que dure mucho por aqui cerca).
Por eso al Granada, sintiéndolo mucho por el lugar que ocupan, y que preferiría que ocupase otro con rayas de otros colores, hay que despedirles mañana con un aplauso una vez que el tio que hace la clasificación en la Federación, o doquiera que toque, haya sumados los tres puntos en el casillero del SFC, y cada uno vuelva y/o permanezca en su sitio. Porque si no algún enteraillo, de esos que estan deseando hablar de crisis y de problemas, va a ver el cielo abierto hasta que podamos volver a callarle la boca. A esos también hay que mantenerles en su sitio...
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