Soy del Lora C.F.

Debe ser que soy de Lora y por eso soy del Lora C.F., como está mandao. Será que me tira lo mío, será que el fútbol en Lora siempre lo puso el Lora C.F., desde que una República era el sistema por el que se entendían los españoles (aunque esto no sea cosa de política). Será que son los mismos colores por los que respiro, porque así lo quiso su fundador, sevillista como yo o yo como él, que para eso nació antes.

Soy del Lora C.F. porque debo. Por más que ahora lo tenga a más de un centenar de kilometros, yo soy de Lora y del Lora C.F. donde las cosas del destino me lleven.

Será que sé, porque también me tocó una temporá, ver lo que cuesta mantener vivas décadas de historia, y el honor de haber colaborado en lo que se pudo y estar a su laito. 

Será que hay recuerdos de noches maravillosamente destrozadas por un penalti que no entró, pero que demostró lo que es un pueblo al lado de su equipo; o será el placer de ver como hoy a mi equipo, al que apenas voy a ver, lo rodean ya unas cuantas de peñas que han montado su cuartel general en la Alameda del Río a las órdenes de lo que diga su Peña Matriz, que vino a homenajear, como ha de hacerse con los grandes, a D. Manuel Aranda, socio fundador y número 1 de la Peña Sevillista "Miguel Herrera Marzo" ¿Se puede amar más el blanco y el rojo?

Demasiadas razones, demasiados motivos y siempre pocos si es por defender la condición de loreño apasionado de su origen y enamorado de su Lora C.F.

Y ahora a pensar en el Dos Hermanas, próximo rival del equipo de mi pueblo, el Lora C.F. Esto es fútbol y lo de más, es lo de menos.