No es afán de grandeza

Es sencilla y humildemente la grandeza hecha sevillanía, sapiencia, categoría, arte, deportividad, ganas de sentir Sevilla, ganas de que Sevilla te sienta. Algo así, más o menos, es lo que tiene este SFC que cada año paseo una foto más impresionante que la anterior.
Y si bonito era el Patio de los Naranjo, más bonito pareció con el SFC dentro. Y si bonito el Puente de Triana, el SFC lo adorno de los colores que mejor lo han sabido vestir: el blanco y el rojo. Y si bonito nuestro escudo, con sus gladiadores delante aún más gigante se hizo. Y alguna imágen se me olvidará, el estremecimiento de ver a mi SFC en semejantes lugares para el posado me hace atropellar los pensamientos.
No es afán de grandeza, es el SFC que te pone los vellos de punta cada vez que aparece donde menos te lo esperas. Es grandeza solamente...
Son las cosas de Sevilla, la que le prestó su nombre, y el SFC le devuelve semejante préstamo en imágenes para la gloria de una Ciudad entera. La misma que se embelesa viendo su nombre cuajado de gloria en unas vitrinas que, para orgullo de todos, Sevilla puede decir que tiene lo que guarda en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán.
Nueva foto para el recuerdo, de todos. Sevilla y el Sevilla Fútbol Club se vuelven a encontrar para admiración de toda la sevillanía, para regocijo de todos los Guardianes de Nervión.