No invitaba el partido hoy a confianzas, los últimos partidos
en Getafe no traían buenos augurios, y la historia tomó los tintes de estos
años atrás desde el principio, si cabe, aún con un Getafe más motivado tal vez
porque el rival también llegaba con el prestigio ampliado.
Esto último nos lo vamos a encontrar este año en muchas
ocasiones, más que otros años, porque el Sevilla es otro, pero otro aún más
grande, y eso, ganarle a un grande pone tela a cualquiera.

Así como anécdotas de la noche: los grupos de whatsapp
hirviendo a críticas contra Ganso todo el partido, incluso acabado el match, o
mi pequeña aportación a la fe en las cosas del fútbol cuando sobre el minuto 70
se me ocurre decir que el partido lo ganábamos, porque era el típico partido en
el que un equipo se hincha a jugar y
el otro en un arreón se lleva los puntos. En fin, por una vez mis pinitos con
la videncia se concretaron en nuestro favor.
Mientras, el sevillismo se enteraba de que Jovetic no vendrá,
se pregunta cuándo llegarán el lateral izquierdo que permitirá oxigenarse a
Escudero, el central que la gente pide pero que Berizzo niega necesitar, y el
delantero sobre el que tantas especulaciones se llevan creadas desde verano:
Bacca que termina en el Villareal, Jovetic quien se anunciaba hoy como jugador
del Monaco que ha cogido alrededor de 200 kilos por el tal Mbappe, y se hablaba
de Batshuayi si Conte reclama a Llorente, sí a nuestro ex Fernando Llorente.
Ese tipo completaría una terna arriba con Miarma
Yedder y Muriel que elevaría a Pepe Castro a los altares del sevillismo si la
efectividad les acompaña, a ver qué pasa hasta el próximo jueves a las 12 de la
noche.
De momento, esto ha sido todo hasta el próximo domingo, a
ver tras el paron qué nos encontramos.
¡¡Vamos mi Sevilla!!