Después del partido de anoche ¿se merece una explicación el
sevillismo? Vaya por delante que #ahoramaquenuncasevillafutbolclub, pero
era demasiadas las ilusiones que toda una aficiñon había puesto en un
partido para que a mitad de partido el equipo pareciera una pandilla de
amigos encantados de conocerse, pero de conocerse en ese mismo instante.
Ha
dicho Michel, según los medios, que las explicaciones -entiendo que
broncas- prefiere darlas a los jugadores en el vestuario. Pero es que
esos mismos jugadores, y el mismo como entrenador, están recurren de
manera continuada a quienes hoy estan a la espera de algo que nos
levante el ánimo. El mismo ánimo que ellos desde el banquillo al último
delantero sembraron con todas las de la ley días anteriores, durante
jornadas previas, a base de superar un periodo tan oscuro como
imprevisto, en una Liga que le ha dado por ponerse interesante para
demasiados equipos que hoy ya se equiparan a nosotros.
Esta
afición necesita una explicación, una garantia por parte de quienes
anoche nos fuimos a dormir cabreados de por qué pasó lo que pasó, y que
no volverá a pasar. Porque este equipo es el SFC. Este equipo no manda
a mandaos, a segundones a dar explicaciones para evitar chaparrones
que sólo ellos (entrenador y capitan, que para eso está) han de
aguantar. Eso sí, con el debido respeto, porque aquí nuestro equipo nos
puede machacar a nosotros, pero a los nuestros nadie es nadie para
machacarles más que nosotros si lo estimamos conveniente, y de eso el
sevillismo sabe tela...
He de suponer que el viajecito a Varsovia es refrescará las ideas, las ganas. Que habrá habido charlita
en el avión de ida y de vuelta, porque mañana, el sábado de la infamia,
ya está aquí. Y eso al margen de que la enfermería no reciba ninguna
solicitud de ingreso, sería para que alguno comenzase a pensarse qué
pinta en nuestro Club.
Lo dicho, el sevillismo, que el sábado de la infamia y la ignominia, reventerá el Ramón Sánchez Pizjuán porque sabe que el SFC es suyo y lo suyo defiende. Vosotros, que vestis nuestra camiseta, defendedlo también
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