sábado, 15 de enero de 2011

Sr. Jeque, me ofrezco

Saludos sevillistas Alteza Real, creo que ese es el tratamiento que merece su dignísima presencia (y perdone el peloteo). Verá, me consta, como a toda España, que se ha gastado usted en seis o siete fichajes lo que no ganaría media Málaga junta (y me refiero a sus trabajadores) en varias décadas: Asenjo, Camacho, Maresca, De Michellis, Baptista, Buonanotte.
Y, sin embargo, hallábame yo en el magnífico Centro Larios de aqui, de Málaga visitando tiendas y viendo gente huyendo de la crísis gastando dinero en sus establecimientos, y buscando donde poder apaciguar el hambre que me comenzaba a hacer acto de presencia entre mis instintos naturales, cuando, de repente, tópome ante una de las tiendas oficiales del club que usted ha adquirido recientemente, el Malaga C.F.. 
Cuál no es mi sorpresa al ver su escaparate. Este...



Y nada tengo contra su estilista, pero resultan varios asuntos:
1º Su club ya no viste UMBRO, viste Li Ning.
2º Los colores de la camiseta no son los de la foto, son muuuucho más claros, y
3º Nacho, el jugador elegido para presidir su escaparate, no es jugador del Málaga C.F., desde hace alguna que otra temporada. Actualmente defiende los colores del RBb, que ni viste UMBRO ni viste Li Ning, viste su propia marca, RBb. (Salva Ballesta y Fernando Sanz, ambos en el interior, son ya historia del Malaga C.F.). Como mucho comparten rayas. Y, podría darse, quizá, algún caso de uso indebido de imágen que implicase a terceros por una tontería de estas. Usted vera...
Y, por todo eso, me ofrezco Alteza (no sé si con esto de los cambios ortográficos en España se escribe con mayúscula o minúscula), porque con todo lo que ha fichado, seguramente Bapstista, de quien por fin tiene el transfer, o Demichelis darían una imágen más actual y más cercana al MCF que el arriba mencionado.
Tengo otras ideas, como fichar a Christian Galvez del Pasapalabra para el escaparate
(Imagenes extraídas de Google)
Se parece al susodicho y probablemente no habría incompatibilidades contractuales. 
Pero bueno, todo es negociable. Eso sí, mi sevillismo no se negocia. Mis ganas de cachondeo, tampoco.
Así que aqui estoy, como sé que paga bien como todo Jeque que se precie, no tiene más que buscarme. Avala mi contratación, especialmente, el hecho de ser sevillista.
Atte.
Un amigo sevillista.

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